Por Antonio Aguilera, SJ I Corrían los vientos de inicios de mayo, en los que algunas nubes aparecen en el cielo para augurar la lluvia jalisciense. Lluvia muy ansiada no solo por el calor que tiende a desesperar a muchos, sino por los campesinos que desean ver fructuosas sus cosechas y por los pescadores que … Sigue leyendo «QUE NUNCA LLEGUE EL RUMOR DE LA DISCORIA»